Croacia, nuestro objetivo en este viaje. Toda una sorpresa!!. Y decir que se ama en su conjunto. Empiezo por Dubrovnik rodeada por enormes murallas y que te hace sentir como parte de juego de tronos. La costa de croacia de acantilados y aguas cristalinas. El atardecer mágico en la isla de Hvar. La luz y el blanco de Split, cuando llegas al Palacio de Diocleciano es como trasladarse a otra época. Y terminar con el encanto de Rovinj, un pueblo pesquero con un precioso casco antiguo y una iglesia que te cautiva.